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Consulta tanatológica, Conferencias, Talleres, Cursos. Construir un puente hacia las personas y familiares que están pasando una situación tan traumática y desconocida como es la muerte, facilitando el crecimiento a través de las pérdidas. Ayudarte a entender y reflexionar acerca de tu verdadera esencia o realidad como ser humano al descubrir o reforzar los valores internos de la persona en la búsqueda de significado para vivir en plenitud.

sábado, 20 de septiembre de 2014

La importancia de la familia en la tanatología

La #familia es la célula de la sociedad donde la persona enriquece su intimidad a través del amor de sus miembros en el ejercicio de su libertad. Este núcleo fundamental de padres e hijos, de hermanos y hermanas, se amplía a parientes, ya sea consanguíneos o afines.
La familia es el primer contacto que tiene el ser humano con otras personas; en ella se ama y se es amado, se aprenden actitudes ante la vida, se descubren valores, y al hacerlo se da un significado a la vida.
Actualmente vivimos en una sociedad en la que lo único importante es el placer por el placer mismo, donde las personas no se cuestionan sobre la importancia del compromiso que se contrae al formar y firmar un contrato de matrimonio.
Se desvirtúa la esencia de la familia lo cual lleva a las personas a experimentar una sensación de frustración, vacío y soledad que no satisfacen la necesidad básica del hombre de nacer, crecer y desarrollarse en una familia estable que satisfaga sus necesidades de amor más profundas.
Todo esto nos lleva a una crisis en el matrimonio y por ende de la familia.
Una familia consciente de su responsabilidad educativa-formativa, va modelando a los hijos poco a poco, con amor. Estos tendrán un gran porcentaje de probabilidades de ser personas cabales y estarán preparadas para la adversidad.
La educación que proporcionen los padres a los hijos debe estar dirigida al perfeccionamiento integral de la persona en todas y cada una de las diversas etapas evolutivas atendiendo a la unidad biopsicosocial y espiritual que cada hombre representa.
Dentro de la familia cada integrante desempeña un rol y una función que no puede ser substituida por nadie.
La familia tiene una estructura interna que se manifiesta en movimientos. Cuando alguien se mueve en el sistema esto afecta a todos los integrantes del mismo, por lo tanto su fortaleza depende de su capacidad para movilizar pautas alternas cuando el entorno interno y externo les invita a una reestructuración.
La familia todos los días se enfrenta  a cambios, a formas diferentes de hacer las cosas; quizá lo que funcionó en una etapa de la vida ahora ya no sirve.
De ahí la importancia de que en el momento en que llega la muerte de algún miembro del sistema familiar, se ve afectado todo el sistema.
Generalmente lo que los integrantes de la familia  requieren es una ayuda porque no saben cómo enfrentar el dolor y el sufrimiento.
En la familia, como en cualquier ente vivo, se presenta un ciclo vital: que surge con un inicio o un nacimiento, crece y se desarrolla, se reproduce y muere.
Durante el ciclo vital de la familia existen periodos en los que sus integrantes tienden a reunirse y permanecer juntos, esto pasa cuando los niños son pequeños; y otros en los que lo sano es separarse y desprenderse del núcleo familiar, para que cada miembro de la familia pase a formar su propio sistema.
A lo largo de este ciclo la familia va viviendo pérdidas y ganancias experimentando crisis ante las cuales tiende a buscar su equilibrio.
Al presentarse las pérdidas en la familia surge el dolor y sufrimiento que éstas conllevan y dentro de estas pérdidas las que más sufrimiento producen son la enfermedad y la muerte.

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